Un orador se dirigió a un grupo de alcohólicos decidido a demostrarles, de una vez por todas, que alcohol era el peor de los males. Sobre su mesa en el estrado tenía lo que a simple vista parecían ser dos vasos llenos de un líquido transparente. Explicó que uno estaba lleno de agua pura y que el otro estaba lleno de alcohol sin diluir, también puro. Colocó un pequeño gusano en uno de los vasos y los presentes pudieron observar cómo éste nadaba por la superficie dirigiéndose hacia el borde del vaso, entonces se deslizó tranquilamente hasta llegar arriba. Luego el orador cogió el mismo gusano y lo colocó en el vaso lleno de alcohol. El gusano se desintegró a la vista de todos. "Ahí tienen" -dijo el orador-. ¿Qué les parece? ¿A qué conclusiones llegan?, Una voz, proveniente del fondo de la habitación dijo muy claramente: "A mí lo que me parece es que si uno bebe alcohol no tendrá nunca gusanos". Fragmento del libro tus zonas erróneas de Wayne W. Dyer.
Es cierto que no todos, pero una buena cantidad de problemas evitáramos, o en su caso entenderíamos el actuar de otras personas, al ver algo desde otro punto de vista.
Entonces aclarar los problemas siempre es bueno y saber reconocer los errores mucho mejor.
Tengo una facilidad no muy envidiable para meterme en problemas, principalmente por mi bocota y en otras por mi forma de ser, trataré de ponerme en lugar de las personas, y si así no resulta, pues la lucha se hace.
Eso si a quien no le perdono nada, es a ese arbitro jijo de la manteca de Archundia que nos vino a robar con silbato en mano y de esa manera sufrimos nuestro primer descalabro, vamos con el Atlante y recibimos al América, no los invito porque el estadio va a estar hasta el cachete, los dos son clientes y espero lo sigan siendo.
Nos vemos luego.
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