viernes, junio 20, 2014

Campamento...

Llego la hora, en que un niño pequeño deja de serlo para convertirse en un niño no tan pequeño, y ese día es hoy, mi Angelator culmina sus estudios de Jardín de niños y como parte de eso, se nos va de campamento.
Los llevan preparando varias semanas, explicándoles todo lo que harán haciendo énfasis en valerse por ellos mismos.

Pero existe un problema con la mamá o sea mi cochi feroz, independientemente del nivel supermaster de consentimiento que ella tiene con él, no para de imaginarse mil situaciones (adversas) a la cuales se podría someter, dignas de una escritora de ciencia ficción – terror – drama – apocalíptico.

Me describió el campamento como si fuera al entrenamiento a los cuales se someten los espartanos para convertirse en soldados, alacranes gigantes, anacondas, insectos prehistóricos obvio de los gigantes, hombres lobo, dragones, zombies, meses sin alimento y agua etc. etc.

Argumenta cosas que según desconozco, que si el instinto maternal, y que nunca ha dormido fuera de la casa, que es su bebé, que lo quiere mucho (lo ultimo con lagrimas en los ojos).

Hablo con ella y le digo que todo estará bien, que mañana lo recogeremos y va a ser una experiencia maravillosa e inolvidable para él.

Por lo pronto hoy lo llevaremos a las 4:00 p.m. y veremos que pasa.

Nos vemos luego.

P.D.

Ángel cuídate mucho, los hombres lobo se matan con balas de plata, te metí en tu maleta el repelente de insectos prehistóricos, lleva tu lanza espartana, tu mami te puso la pócima contra dragones en la maleta, el agua bendita va en tu cantimplora, los zombis mueren como lo vimos en the walking dead, y sobre todo, algo que no considero tu mamá, si las maestras se convierten en brujas aviéntenlas en la fogata como Hanzel y Grettel.